En los límites de una teoría cuántica de la consciencia

Alfonso Luis Masotti

Desde una perspectiva histórica, filosófica y científica el autor expone los prolegómenos que enfrentaron los constructos cerebro-mente-consciencia en estos últimos dos siglos. La unificación de los estados de consciencia, no necesariamente establecidos como tales para todos los organismos vivos, aunque si presentes como estados de proto-consciencia para la mayoría de ellos, requiere de la sincronía de la actividad sináptica. Estos estados de consciencia o de proto-consciencia pueden ser definidos como una secuencia de discretos momentos o eventos, en los que la participación de la percepción y evocación de los contenidos de ideación preservados pueden ser asociados con su estabilización en la consciencia. El autor arguye que la consciencia emerge como producto de un proceso sináptico complejo a partir de una red neuronal que contiene las experiencias que deconstruyen la realidad circundante del individuo, constituyendo esa acción en un epifenómeno singular que en su tesis doctoral denominó Avocación de (la insistencia de) deseo o producción de sentido. La hipótesis de la incorporación de los fenómenos cuánticos en la estabilización de la actividad consciente propuesta por Hameroff & Penrose, confirma la factibilidad de los estados de conciencia como producto de la interacción entre memoria y percepción y aunque los mecanismos cuánticos no logran explicar la experiencia de consciencia, indudablemente la condescienden. La presente obra, sin precedentes en la lengua hispana, representa una contundente crítica a la acepción tradicional del binomio consciencia-inconsciencia al asumir que la experiencia de consciencia fuese un epifenómeno basado en la inestabilidad molecular de la materia que originó un flujo constante de intercambio de información que Torday & Miller han equiparado con la homeostasis, pivote de la indeterminación sistémica asociada a la alostasis y la singularidad ontogénica. En el camino evolutivo hacia los vertebrados que originó la diferenciación de los tejidos y la aparición del cerebro como coordinador de las interacciones entre los sistemas fisiológicos, fue necesario diferenciar el procesamiento de la información entre el sistema autónomo (balance endocrino) y el voluntario. Entonces surgió por añadidura la consciencia como una instancia que permitiese la toma de decisiones del individuo sobre el entorno a partir de una epojé eidética expuesta en su teoría de la producción de sujeto de deseo o producción de sentido y desarrollada a lo largo de su extensa obra.

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ALFONSO LUÍS MASOTTI, graduado en psicología en la Universidad Argentina J.F. Kennedy (1979), doctorado en psicología (1995) en la misma universidad, alcanza su especialización en el campo de la epidemiología epigenética con el post-doctorado en psicoinmunología en 2001. A lo largo de su trayectoria profesional se ha desempeñado como docente en la Universidad de Buenos Aires y en la Universidad Argentina J.F. Kennedy en las cátedras de Psicología Clínica y Metodología del diagnóstico clínico, y en el campo asistencial en el Centro de Rehabilitación de Gral. Sarmiento, en el departamento de Salud Mental de la Municipalidad de Tres de Febrero y en la Dirección de Psicología y Asistencia Social Escolar en la provincia de Buenos Aires. Como investigador independiente ha publicado en la Editorial Tekné cuatro obras y como Director del área de Epidemiología Epigenética y Psicoanálisis de la Editorial Letra Viva, cargo con el que continúa en la actualidad, once obras en torno a la difusión de una semiología epigenética que integra filogenia con ontogenia en el desarrollo de las enfermedades crónicas.