Más de cien años rubrican la vigencia de un descubrimiento: el Inconciente, un programa que funciona aunque la pantalla de la conciencia no lo muestre. Sacudió a la cultura de un siglo que abundó en aciertos y desaciertos, que llevaron hasta el horror la prueba de su eficacia. La suplicante carta de Albert Einstein al genial creador del psicoanálisis, Sigmund Freud, muestra en el desgarro del investigador de la ciencia dura, el límite que la razón encuentra cuando se encuentra con el despliegue de la compleja estructura del humano.
Que estos textos que ofrecemos se brinden reiterados no es más que la prueba de una posición a la que no renunciamos: nuestra respuesta nos corresponde allí donde la ciencia que desconoce al del Inconciente se encuentra sin respuesta. Y distante de modas y famas retoma los invariables que desde su genial descubridor, muestran la razón de la sinrazón.
En su versión primera Paso a pase se repartió en dos textos que hoy se ofrecen en sucesión: El objeto y sus destinos, El amor y sus razones.
En oferta para el ejercicio del pliegue, textos de estos tiempos invitan a un efecto de sentido que extiende los alcances de los primeros y rubrica una secuencia que nos guía: La lógica del acto en la experiencia del análisis; El deseo; Del síntoma al sinthome; y Análisis finito, análisis transfinitos.
Isidoro Vegh, psicoanalista. Autor de diversos libros. Publicó Matices del Psicoanálisis (Editorial Agalma, 1991), Las intervenciones del analista, segunda edición (Editorial Agalma, 2004), Hacia una clínica de lo real (Editorial Paidós, 1998), El prójimo, enlaces y desenlaces del goce (Editorial Paidós, 2001), Estructura y transferencia en la serie de las neurosis (Letra Viva Editorial, 2008), y últimamente El abanico de los goces (Letra Viva Editorial, 2010) y Yo, Ego, Sí-mismo. Distinciones de la clínica (Editorial Paidós, 2010).